Comienzan las hostilidades en el noreste de Siria
Turquía lanzó hoy una ofensiva militar en el norte de Siria contra las milicias kurdas, dijo el presidente del país, Recep Tayyip Erdogan, poco después de que descubrieran que habían sido bombardeadas.
«Las Fuerzas Armadas turcas han iniciado, junto con el Ejército Nacional Sirio (antigua milicia del Ejército Sirio Libre), la operación ‘Primavera de Paz’ en el norte de Siria», escribió el jefe de Estado en Twitter.
Agregó que la operación estaba dirigida contra el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), el grupo extremista Estado Islámico (EI) y la milicia kurda siria YPG, que domina la región luego de recibir el apoyo de Estados Unidos en la lucha contra el EI.
“Nuestro objetivo es eliminar el corredor terrorista que se formará en nuestra frontera sur para traer paz y seguridad a la región”, agregó el mandatario.
El anuncio se produjo en medio del primer bombardeo de aviones turcos sobre la ciudad de Ras al Ayn, en el noreste de Siria, informó la agencia EFE.
La ofensiva comenzó poco después de que Erdogan agradeciera en una conversación telefónica a su homólogo ruso, Vladimir Putin, su «postura constructiva» sobre la ofensiva turca.
Horas antes, las milicias kurdas y las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) anunciaron el primer bombardeo y llamaron a la comunidad internacional a evitar una «catástrofe humanitaria inminente» en la región.
“Hacemos un llamado a la comunidad internacional y a todos los países de la coalición internacional contra el Estado Islámico que lucharon juntos y juntos triunfaron sobre el Estado Islámico para que asuman sus responsabilidades previniendo un posible desastre humanitario”, se lee en el comunicado de la FSD.
Los ataques de las fuerzas turcas y sus aliados provocarán un «derramamiento de sangre de miles de civiles inocentes» porque se trata de zonas fronterizas pobladas, añadió el comunicado.
El FSD ha advertido de que la movilización de sus tropas hacia la zona fronteriza para responder al ataque turco debilitará su capacidad para hacer frente a posibles acciones del EI y para vigilar a los 12.000 combatientes que tiene retenidos el grupo yihadista y a los 70.000 familiares de miembros del EI que están en campamentos. .